La importancia de la digitalización para los comercios tradicionales en Jaén

En la mayoría de casos, la compra física se deja como una experiencia de ocio más que por pura necesidad, mientras que las compras más habituales pasan a ser exclusivamente online. Las marcas lo saben y centran sus esfuerzos en ofrecer una experiencia online que les permita diferenciarse.

Este cambio, que antes parecía exclusivo de las grandes compañías, también afecta de forma directa a los pequeños y medianos comercios. Esta tendencia también ha llegado a Jaén, donde cada vez son más los negocios locales entienden que, para seguir creciendo, deben adaptarse a un entorno en el que la visibilidad online es tan importante como la del escaparate físico.

En este sentido, contar con el apoyo de una agencia de Google Shopping se ha convertido en una de las estrategias más efectivas para transformar visitas en ventas y conectar con el nuevo consumidor digital.

El nuevo perfil del comprador Jaén

Los hábitos de consumo han cambiado drásticamente. Hoy, antes de entrar en una tienda, el comprador ya ha buscado opiniones, comparado precios y analizado alternativas desde el teléfono.

Este comportamiento se repite también en Jaén, donde cada vez más clientes utilizan internet como punto de partida para sus decisiones de compra. Aquí ya encontramos el primer punto clave para los negocios tradicionales: aquellos que aún no cuentan con presencia digital pierden la oportunidad de ser vistos en ese proceso previo. Por tanto, quedarán en desventaja frente a los competidores que sí lo hacen.

Aún están a tiempo. Aunque la competencia online sea feroz, existen alternativas y herramientas que pueden destacar rápidamente a estos negocios tradicionales, como aparecer en Google Shopping.

Google Shopping: el escaparate que nunca cierra

Entre las herramientas disponibles, Google Shopping se ha convertido en una de las más potentes para los negocios locales.

Shopping es un servicio que permite a los comercios mostrar sus productos de manera destacada en los resultados de Google. No se trata de un anuncio tradicional, hablamos de imágenes, precios y descripciones de producto, un recurso mucho más visual que hace que los futuros compradores vean de inmediato aquello que buscan sin necesidad de hacer clics en enlaces.

Este tipo de campañas funcionan como un escaparate digital abierto las 24 horas del día, los siete días de la semana. Así, los comercios tradicionales pueden competir en directamente con grandes marcas, llegando al público en el momento exacto en el que está dispuesto a comprar. Además, la posibilidad de medir cada clic y cada conversión ayuda a los comerciantes a optimizar su inversión, ajustando sus campañas para obtener el máximo rendimiento.

Sin embargo, es necesario aclarar que aunque este servicio es sencillo de utilizar, para aprovechar al máximo sus ventajas es fundamental contar con la experiencia de una agencia especializada en Google Shopping. La necesidad de configurar correctamente el feed de productos, segmentar el público o el sistema de pujas es algo que no debe “hacerse por hacer”, requiere una gestión profesional que garantice que los anuncios aparezcan justo en el momento exacto.

La presencia online para rescatar al comercio tradicional

El ser capaces de aprovechar todas las herramientas que los comercios tradicionales tienen a su disposición puede ser la solución necesaria para que el alma de Jaén no desaparezca.

La realidad de estos comercios es que están desapareciendo a una velocidad vertiginosa, esta situación requiere medidas adicionales que puedan revertir o al menos frenar esta situación. Cada persiana bajada representa una historia que se pierde, la digitalización no es solo una opción, sino una oportunidad real para mantener con vida el comercio de toda la vida.

Junto al establecimiento original es necesario contar con una presencia online bien trabajada y asesorada por profesionales que conozcan la realidad tanto del mercado como del propio comercio local. Esto permite contactar con este nuevo perfil de consumidor más informado sin reemplazar el trato personal que hace único al comercio tradicional.

Cuando esto pasa, no solo beneficia a la propia empresa, sino que también tiene su impacto directo en la economía local, fortaleciendo el tejido empresarial de la provincia y haciéndolo más resistente frente los cambios que estén por venir.