El 75% de las personas con adicción en Jaén atendidas por Proyecto Hombre presentan ansiedad severa

La salud mental juega un papel fundamental en los problemas de adicciones y así lo pone de manifiesto la Fundación Proyecto Hombre Jaén. El informe de 2024 pone el acento en la alta comorbilidad entre adicciones y trastornos de salud mental, con un 75 por ciento de las personas atendidas en Jaén que padecen ansiedad severa, un 63 por ciento depresión severa y un 46 por ciento ideación suicida.

Este informe sobre las personas atendidas en Jaén ha sido presentado en rueda de prensa por Rafael Ramos y Pedro Pedrero, presidente y director de la Fundación Proyecto Hombre Jaén, junto a Isabel Mateos, presidenta de la Asociación Amalthea.

Los datos del pasado año reflejan diferencias significativas entre hombres y mujeres, ya que ellas presentan mayores niveles de trastornos emocionales y cuadros severos de depresión, lo que exige un enfoque más específico en los tratamientos dirigidos al género femenino.

Pedrero ha señalado que esta mayor vulnerabilidad en las mujeres responde a diversos factores, entre ellos la carga del cuidado de hijos y una mayor exposición a abusos tanto emocionales como físicos, entre otros aspectos relevantes. Respecto a las adicciones más frecuentes tratadas en 2023, el documento indica que la cocaína (51,2%) y el alcohol (31,2%) se mantienen como las sustancias más consumidas. No obstante, se subraya la importancia de reforzar la prevención en el consumo de cannabis.

Aunque solo el 3,20% de los casos atendidos tenían el cannabis como principal adicción, esta sustancia aparece como secundaria en el 41,03% de las personas tratadas por Proyecto Hombre en la provincia de Jaén, según los datos ofrecidos por Pedro Pedrero. Durante el año pasado se atendió a un total de 903 personas, una cifra que incluye tanto a personas con adicciones como a sus familiares. De estas, 386 fueron atendidas en diagnóstico y programas ambulatorios, mientras que 285 pasaron por los programas residenciales. Además, 232 personas participaron en los programas aplicados en el Centro Penitenciario de Jaén.

Otro dato a tener en cuenta es el impacto de los programas de prevención, con los que se alcanzó a 769 personas. De ellas, 36 participaron en prevención indicada, 103 en prevención selectiva y 630 en prevención universal. Desde 2020, la edad media de los pacientes ha ido en aumento, pasando de 36 años en 2013 a casi 40 en 2024. Un 18,5% de los usuarios tienen más de 50 años. Este grupo, formado sobre todo por hombres casados con empleo y larga trayectoria de consumo de alcohol, es especialmente vulnerable cuando carece de apoyo.

En el caso de las mujeres mayores de 50 años, el 70,4% acude por problemas con el alcohol, sustancia que se ha convertido en la causa más común de solicitud de ayuda, sobre todo en mujeres y personas mayores. Al ser legal y socialmente aceptado, su consumo se detecta tarde, retrasando la demanda de tratamiento.

La presencia femenina en los programas ha crecido, pasando del 15% en 2020 al 18,1% en 2024. Aun así, las mujeres tardan en pedir ayuda, con una media de 18 años, debido al estigma, la falta de apoyo y la normalización del consumo.