Agricultores aseguran que los fitosanitarios autorizados contra el algodoncillo no funcionan: "Va a ser otra ruina"

Los olivares de la zona de Las Villas y parte de Segura están cubiertos de blanco, hasta los vehículos del campo quedan llenos de motas blancas debido a la plaga del algodoncillo del olivo (euphyllura olivina) y que afecta a más de 10.000 hectáreas.

Fue en mayo del año pasado cuando se empezó a notar una proliferación importante de este insecto. Afecta a la fotosíntesis, ya que se alimenta de la savia de las hojas, impidiendo el crecimiento y agravando la salud del árbol. Al recubrir las inflorescencias, el algodoncillo por asfixia paraliza el fruto.

Tras el grave daño que provocó arruinando la producción de miles de hectáreas y reduciendo la cosecha, Sanidad Vegetal ,de la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía, autorizó fitosanitarios específicos para acabar con el insecto y el 4 de abril se dio luz verde para el comienzo de las curas.

Los técnicos indicaron aplicarla en dos ocasiones, sin embargo, la mayoría de olivareros afectados ya las han completado y no ven los resultados. Desde lejos parecen árboles nevados y así a lo largo de kilómetros y kilómetros. "Nos está suponiendo un problema porque después de dos tratamientos e incluso de tres tratamientos en algunas zonas no lo podemos controlar, ya que los adultos pusieron una puesta de huevos masiva, las ninfas se mueren, pero como quedan huevos a la semana o a los días vuelven a salir más ninfas. A la hora de tratar, el problema que tenemos es que como hace la masa algodonosa crea una cera que es imposible que penetre el producto", explica Óscar Martínez, un joven agricultor de Las Villas.

Después del hartazgo y desesperación de cientos de agricultores que se encuentran en esta situación y tienen miedo de que la siguiente cosecha se eche a perder, desde el Ayuntamiento de Villanueva del Arzobispo convocaron una reunión este domingo. A esta, asistieron técnicos de las diferentes cooperativas, así como representantes de todos los grupos políticos, asociaciones agrarias y empresas de fitosanitarios con el objetivo de buscar otra solución.

Asimismo, ayer 4 de abril tuvo lugar otra reunión de urgencia con los técnicos de Sanidad Vegetal que hasta ahora han estado a cargo del estudio y control de la plaga y con la delegada en Jaén de Agricultura de la Junta, Soledad Aranda. Tras más de cuatro horas congregados parece no haber una conclusión concreta, tal y como adelanta a este medio el concejal de Agricultura, Pablo Ruiz. No obstante, se espera que hoy o en los próximos días la Consejería emita un informe sobre los pasos a seguir.

"Yo respeto las decisiones de los técnicos porque ellos son los expertos, pero no he salido muy contento. No podemos tener más paciencia porque los próximos días son decisivos, cuando la flor empiece su periodo de apertura y no pueda, no habrá marcha atrás. Ellos se escudan en que llevan una zona muy poca amplia, entonces donde antes había once larvas ahora hay cuatro, pero la mayoría no son así", expresa Ruiz. "Las herramientas que tenemos no son suficientes, si no se soluciona tenemos la ruina otra vez, no podemos estar haciendo ensayos, ni haciendo juegos. Llegaremos donde haga falta", añade.

Tras seguir las indicaciones y gastar miles de euros en los productos, los agricultores aseguran, que además de no funcionar, la plaga se está extendiendo y llegando a zonas donde antes no había incidencia de este blanco insecto. "Como no nos saquen algo que nos sirva para matar esta plaga pues sería otro año más sin cosecha, después de dos años de sequía y dos años con la plaga de algodón, serían cuatro cosechas y hay gente que se va a la ruina. Esperemos que los técnicos saquen alguna conclusión, pero hay zonas que ya es tarde", expresa Martínez.

Coag pide soluciones

COAG en Jaén ha solicitado a la Junta de Andalucía que diseñe "una estrategia clara y completa" contra el algodoncillo en el olivar, "más efectiva a la propuesta hasta ahora" ante un insecto que "afecta a gran parte de la zona jiennense de Loma Alta".

Igualmente, ha demandado la aprobación de tratamientos alternativos, y que se evalúe de forma exhaustiva los daños ocasionados en todas las parcelas y productores afectados, según ha informado este martes la organización agraria.

"Es el tercer año que los olivares de la zona de Loma Alta y más concretamente la localidad de Villanueva del Arzobispo, sufren el ataque del algodoncillo. Un insecto que obtiene su alimento picando en el tejido vegetal y succionando la savia del olivo", ha explicado.

COAG-Jaén ha señalado que, "por lo general, este agente no causa daños aparentes, no necesitando de control fitosanitario específico". Sin embargo, se ha convertido en "un problema extremadamente grave en la zona de Loma Alta", en localidades como Villanueva del Arzobispo, Iznatoraf, Beas de Segura y Villacarrillo, donde "sufren pérdidas de cosecha, en algunos casos del cien por cien, desde hace dos años".