Porcuna denuncia el estado de abandono de uno de sus accesos: "Cada año arde y nadie hace nada"

La entrada a Porcuna por la A-306 desde Lopera se ha convertido en un manto seco de pasto inflamable. Los márgenes de la carretera, cubiertos de maleza y ramas acumuladas durante años, son cada verano una chispa a punto de estallar. La falta de mantenimiento ha transformado este acceso en una montaña de combustible.

José Antonio Aljarilla, cuya esposa tiene una finca en la zona, lo resume con crudeza: “Esto está abandonado completamente. Todos los años le meten fuego, arde y hay un peligro real porque además hay casas de vecinos cerca”. La última muestra de este peligro se vivió hace apenas dos noches. A las 2:30 de la madrugada se declaró un incendio que pudo tener consecuencias graves. Así lo explica el alcalde, Miguel Moreno Lorente: “Pudimos, con los bomberos y la policía, apagarlo pronto, y al día siguiente, con medios municipales, enfriarlo. Pero no podemos estar siempre así. Llevamos tres o cuatro años reclamando a la Junta de Andalucía que mantenga esa zona y no lo hacen”.

Mientras tanto, los vecinos cargan con los daños. “A mí me han ardido olivos varios años seguidos y nadie me paga esa pérdida”, lamenta Aljarilla, que asegura limpiar cada año lo que puede de su terreno. “Vienen, cortan los árboles, los dejan tirados en la carretera, y eso se convierte en más combustible para el fuego”.

El alcalde respalda esas quejas y las amplía: “Esa zona es muy boscosa, y, a la mínima, ya sea un cigarro, un descuido o mala intención, prende con facilidad. Lo del otro día podía haber acabado en tragedia, porque está a apenas 70 metros de las primeras viviendas”.

Lorente subraya la importancia de la prevención, sobre todo en la región andaluza, donde los veranos son especialmente calurosos: “Este año hemos visto en toda España lo crucial que es anticiparse a los incendios, pero aquí llevamos tres o cuatro años pidiendo limpieza y conservación y no se hace nada”. Aljarilla insiste en que el problema es estructural. “He hablado con capataces y responsables, pero me dicen que ellos no pueden hacer nada. Entonces, ¿quién lo hace?", denuncia.

Llamamiento a la acción

Vecinos y Ayuntamiento coinciden en un mismo mensaje: la necesidad urgente de actuar antes de que ocurra una tragedia. “Un poco de seriedad. Que corten y limpien, que se hagan cargo. Somos personas y no puede ser es que cada verano volvamos a vivir el mismo infierno de llamas y abandono”, reclama Aljarilla.

Lorente respalda la denuncia y asegura que no piden nada extraordinario, sino algo básico como es el mantenimiento: "Lo del otro día podía haber acabado en desgracia y, si seguimos así, cualquier verano será inevitable”.