Promesas y emoción llenan San Ildefonso en la ofrenda floral a la Virgen de la Capilla

Pese a la incertidumbre de un cielo gris y cortas, pero intensas lluvias, a primera hora de la mañana, los jiennenses no faltaron a su tradicional cita con la Virgen de la Capilla este 11 de junio. En torno al medio día, el desfile liderado por la Banda Municipal de Música de Jaén entraba en la Plaza de San Ildefonso para guiar a todos los devotos frente a la copatrona de la ciudad para proceder a la ofrenda floral.

Tras dar la vuelta por la Reja de la Capilla y al ritmo de los pasodobles que interpretaba la banda, se colocaba el primer arreglo junto a la Virgen de la Capilla. Las flores eran el lenguaje común de una ciudad que renueva públicamente su vínculo con su Alcaldesa Perpetua. Como no podía ser de otra forma, no faltaron los miembros de la Asociación Lola Torres quienes ataviados de chirris y pastiras recogían los ramos de las manos de los jiennenses por lo que, en tan solo unos minutos, cientos de margaritas, claveles, rosas y lirios de todos los colores comenzaron a condecorar la fachada de la parroquia.

El acto fue más que una procesión de colores: fue un desfile de identidades. Participaron todo tipo de asociaciones, peñas y cofradías. Juntos a ellos representantes políticos como el alcalde Julio Millán, África Colomo, María Espejo, el delegado de la Junta, Miguel Contreras. La variedad de ramos dejaba ver que la devoción por la Virgen de la Capilla no entiende de edades ni de estatus sociales, sino que es un lazo que une a la ciudad.

Una vez finalizada la ofrenda, llegó el turno de los momentos más especiales y más esperados por los jiennenses: la interpretación del Bolero de Jaén, una pieza tradicional que, como cada junio, volvió a sonar en la plaza. Con su ritmo pausado y cargado de identidad, sirvió como broche de oro de una mañana marcada por la devoción, la participación y la memoria colectiva de la ciudad.

Un año de celebración

Jaén está viviendo un 2025 histórico, marcado por conmemoraciones que reflejan la profundidad de su identidad y su devoción como el 595 aniversario de la aparición de la Virgen de la Capilla, el 75 aniversario de su nombramiento como patrona y los 1200 años de su capitalidad. Tres hitos que se entrelazan en un calendario cargado de emoción, fe y orgullo jiennense.

En el día grande de la patrona, cuando el fervor popular alcanza su máxima expresión, la Alcaldesa Perpetua volvió a recorrer las calles de la ciudad, como cada 11 de junio, rodeada del cariño de miles de fieles que no quisieron perderse esta cita con la tradición. La imagen de la Virgen de la Capilla, símbolo espiritual y cultural de la ciudad, avanzó entre vítores, pétalos y lágrimas, arropada por la música solemne de la Agrupación Musical La Estrella, la banda de Nuestra Señora de la Amargura y la Sociedad Filarmónica de Jaén.