Jaén se convierte se convierte en escaparate de la caza y la pesca: "Si los cazadores no existieran, habría que inventarlos"

Todo tipo de armería, vehículos 4x4, visores nocturnos, trajes de caza de camuflaje, tiro con arco, podencos, perdices, o el olor de las carnes de monte llenan el espacio desde primera hora en el Palacio de Ferias y Congresos (Ifeja) para acoger la XVII edición de Ibercaza-Caja Rural, una cita que se prolonga hasta el domingo convierte a la provincia en epicentro nacional de la caza y la pesca. Organizada por la Diputación de Jaén, la feria reúne a miles de aficionados y profesionales en un espacio de 8.000 metros cuadrados, con más de 80 expositores nacionales e internacionales y un programa con 30 actividades para todos los públicos.

Durante el acto de inauguración, el presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, subrayó la relevancia de este evento en una provincia que cuenta con una larga tradición cinegética. “Hablar de caza en Jaén son palabras mayores. Contamos con 15.000 cazadores federados en la provincia y tenemos que decir con orgullo que la actividad cinegética moviliza más de 20 millones de euros. Es una actividad deportiva, pero también económica, genera empleo, mantiene la vida de nuestros municipios y la actividad de nuestros cotos. Si los cazadores no existieran, habría que inventarlos, porque realizan una labor de prevención en nuestros montes y, además, es un deporte que iguala a la ciudadanía, es un deporte que está al alcance de cualquier ciudadano”, apuntó Reyes.

La caza es un motor económico en Andalucía, pero con una importante carga en Jaén a nivel nacional e internacional, tal y como señala la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta, Catalina García. Hasta alrededor de 45.000 empleos los que están relacionados con el sector cinegético y la pesca y 1.500 millones de euros los que aporta al P.I.B. en Andalucía. "Los cazadores se han convertido en una herramienta fundamental en la sostenibilidad medioambiental y la conservación de ecosistemas y sin los cazadores tendríamos que tener otras herramientas", señaló García. El subdelegado del Gobierno, Manuel Fernández, también recordó la dura temporada que se ha vivido en Andalucía y en España con los incendios: "El mundo de la caza tiene mucho que decir, y son actores fundamentales, debemos abrir un momento para la reflexión".

Las palabras de Reyes cobran sentido al recorrer los pasillos. En los stands se despliega un mosaico de propuestas, organizaciones de caza mayor y menor, armerías, taxidermia, óptica, cuchillería, piel, artistas de caza, vehículos 4x4, medios especializados, federaciones, adiestradores de perros, rehalas, mobiliario de caza, granjas cinegéticas, planes cinegéticos y mucho más. Una oferta que refleja la diversidad y fuerza de un sector que en Jaén no solo es pasión, sino también motor económico.

La feria no es solo escaparate, también es experiencia. Los visitantes participan en el tiro olímpico con carabina de aire comprimido, se sorprenden con el tiro con arco al vuelo, siguen atentos las exhibiciones en el voladero con especies autóctonas, y un grupo de jóvenes observan con interés a la unidad canina especializada en detección de cebos envenenados. Un programa pensado para mostrar tanto la tradición como la innovación de un sector que evoluciona sin perder sus raíces.

"Creo que el visitante se va a encontrar en Ibercaza un espacio donde se mezcla la parte lúdica y comercial de todo lo relacionado con la caza y la pesca. Sabemos que Jaén es una provincia que destaca por sus parques naturales y la cantidad ingente de cotos, por tanto, creo que es el sitio ideal para ver las últimas novedades que presenta el sector. Tenemos aquí las mejores marcas", explica a Jaén Hoy, el gerente de Ifeja, Ángel Vera.

Y entre tanto, los sentidos se despiertan también en el ámbito gastronómico. El olor inconfundible de la carne de campo se hace presente en Ibercaza, con propuestas como las de Estefanía Fernández, que ha llegado desde la Alpujarra con sus embutidos: “Es el primer año que venimos. Esperamos mucha afluencia de público. Nuestros productos son caseros, naturales, sin alérgenos ni aditivos artificiales. No solo saben bien, sino que sientan bien. Hemos traído un trocito de la Alpujarra a Jaén”.

Frente a ella, la marca Degusta Jaén aporta el sabor más local con la participación de 15 empresas agroalimentarias que promocionan la calidad de los productos jiennenses. Además, se celebran dos degustaciones con carne de caza ofrecidas por cuatro empresas especializadas y adscritas a la marca.

El bullicio empieza a ser cada vez mayor conforme pasan las horas, personas y familias venidas desde diferentes puntos de la provincia y fuera de ella vienen para ver las últimas novedades y aprender del sector. "Vengo de Puertallano, es la primera vez y he venido para acompañar a mi padre, somos cazadores de toda la vida y siempre se aprende algo", cuenta Ángel Valero.

Por su parte, la primera teniente alcalde y concejala de Cultura y Turismo, María Espejo expresó el apoyo del Ayuntamiento de Jaén a la feria, que cuenta con un stand propio donde se divulgan todas las bondades de la capital, en especial, en este año cuando se conmemora el 1.200 aniversario y también dando a conocer todas las propuestas culturales y turísticas, así como los productos artesanos locales.

Además, el portavoz del grupo parlamentario Vox en Andalucía, Manuel Gavira, anunció que su formación va a solicitar que todas las modalidades de caza sean declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) para que el Gobierno de Andalucía "entienda la importancia que tiene", y que el sector "no languidezca, sino cada vez sea más fuerte".

Ibercaza encara esta XVII edición con cifras que confirman su consolidación, entre 8.000 y 10.000 visitantes se espera que pasen por el Palacio de Ferias y Congresos de Jaén durante el fin de semana, con los datos que se manejan y de las entradas ya vendidas. Un respaldo que demuestra que esta feria no solo es un referente nacional del mundo cinegético, sino también un motor de identidad, economía y encuentro para una provincia que vive la caza como parte esencial de su cultura.