Un jiennense emigrado y 110 huevos, detrás de la tortilla de patatas más grande del mundo

Casi resulta difícil superar la gran variedad de retos virales que reúnen las principales redes sociales hoy en día. Sin embargo, el creador de contenido Julio Caviedes compartía hace unos días un vídeo que no deja indiferente a nadie. El cocinero de la Brasería Avenida de Calanda, Teruel, lograba dar la vuelta a la que podría ser la tortilla de patatas más grande del mundo: de 110 juevos ni más ni menos, además de 10 kilos de patatas y otros dos de cebolla.

El protagonista del vídeo en cuestión, Eduardo Pérez, es un jiennense emigrado de su tierra hace algo más de cuatro décadas. A sus 68 años no hay tarea que se le resista, incluso si se trata de superar su propia marca personal, situada hasta entonces en una tortilla de 60 huevos. Este vecino de El Molar, pedanía de Cazorla, ya se empleaba a fondo con las migas desde pequeño. "Con eso de darle vueltas a la sartén acabas cogiendo manejo", cuenta.

Su relación con la hostelería y la cocina más tradicional han caminado prácticamente a la par desde que orientase su vida junto a su familia en la provincia de Teruel. Sin embargo, la gastronomía de su tierra sigue igual de presente en su recetario aún a día de hoy. "En una de mis visitas me compré una de las sartenes más grandes que encontré", explica. Su arma en los fogones, con una resistencia y capacidad encomiables, "solo se encuentra por el sur".

Al tiempo que su hazaña atiende al algoritmo de las redes, su historia guarda muchas más capas que esta tortilla. "Me dedicaba a una empresa de espectáculos y antes traía bastantes orquestas de la provincia de Jaén por aquí", señala. Sin embargo, la situación derivada de la pandemia provocó que acabase cogiendo las riendas de un restaurante de Calanda junto a su familia. Y ahora, en la Brasería Avenida expone los retos propios de un cocinero de récord.