Un mes sin agua potable en El Porrosillo: "Queremos explicaciones de por qué ha sucedido"

El pequeño núcleo de población de El Porrosillo -dependiente de Arquillos- ha recuperado el suministro de agua potable tras un mes sin poder consumir agua del grifo ni para beber ni para cocinar. Una situación que durante semanas ha alterado por completo la vida cotidiana de sus vecinos que se prolongó sin la información necesaria para tranquilizar a la población.

Cristóbal Castillo, vecino del municipio, explicó que el aviso de que el agua no era apta para el consumo humano llegó de forma poco clara y sin un sistema eficaz de comunicación, algo especialmente grave en una población con personas mayores que no utilizan redes sociales. “Ni siquiera fue un bando municipal, sino que la empresa publicó un comunicado en redes. En un pueblo pequeño alguien debería haber avisado con un altavoz o un coche, pensando en quienes no acceden a internet”, lamentó.

Desde entonces, los vecinos dependían de un camión cisterna para abastecerse de agua potable, aunque el suministro resultaba insuficiente. Hay días en los que el camión se queda sin agua durante horas, obligando a las familias a comprar garrafas para cubrir necesidades básicas: “Pasamos tardes enteras sin agua potable y eso no es una verdadera solución”.

El problema, además, genera desconcierto entre los vecinos. Y es que el agua procede del mismo sistema -la planta del Dañador- que abastece a otros pueblos de El Condado en los que no se ha detectado ninguna incidencia. Según explicó Castillo, El Porrosillo cuenta, además, con dos depósitos de agua, lo que lleva a los residentes a preguntarse por qué no se ha resuelto la situación mucho antes.

La falta de agua potable llegó a afectar también a la actividad económica del núcleo como la fábrica de aceite que depende del suministro mediante cisternas para poder seguir funcionando. Para los vecinos, esta situación ya ha sido la gota que ha colmado el vaso si se tiene en cuenta los múltiples microcortes de agua habituales en la zona: "Yo entendería que si el pantano no tiene agua, como cualquier otra persona, pues que no tengamos agua".

Por su parte, el alcalde de Arquillos, Miguel Ángel Manrique se pronunció a través de sus redes sociales. En un vídeo publicado a través de Facebook, Manrique explicó que desde el Ayuntamiento se ha enviado un escrito formal tanto a Diputación como a Somasaja para exigir que se envíen todos los informes disponibles. "Queremos explicaciones de por qué ha sucedido. Esto no va a quedar así, no vamos a quedarnos de brazos cruzados", denunció.

Niveles de clorato por encima de lo permitido

Según explicaba a Jaén Hoy Manuel Expósito, director técnico de Somasaja, los valores detectados en El Porrosillo se sitúan en 73-74 microgramos por litro, ligeramente por encima del máximo permitido —70— tras la entrada en vigor de la nueva legislación, que ha reducido los límites y dificulta su cumplimiento en zonas con mayor tiempo de residencia del agua. “El proceso es el adecuado, pero en El Porrosillo el agua llega al final del sistema y permanece más tiempo, lo que favorece que aumente la concentración de clorato”, señaló.

Para corregir la situación, la empresa de aguas está aplicando medidas que incluyen minimizar los almacenamientos de cloro y reducir las recloraciones, con el objetivo de acortar el tiempo de contacto del desinfectante sin comprometer la calidad sanitaria del agua.