Estos son los siete maravillosos Monumentos Naturales de Jaén
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Se trata de espacios o elementos de la naturaleza constituidos por formaciones con notoria singularidad, rareza o belleza, que merecen ser objeto de una protección especial y la provincia posee una riqueza natural sinigual
Declarado Monumento Natural de Andalucía, es uno de los lugares más destacados del Desfiladero de Despeñaperros, donde se alzan un conjunto de enormes columnas de roca que se asemejan a los tubos de un órgano de una gran catedral. Aumenta la belleza de este paraje el contraste cromático del gris de las rocas con el intenso amarillo y anaranjado de las diferentes especies de líquenes que aquí sobreviven.
Se trata de un lugar de especial interés paisajístico cuya singularidad radica en la presencia de un bosque de ribera, una rica avifauna y elementos de enorme valor geológico, así como los restos de un puente y una calzada de época romana.
Este Monumento Natural de Las Huellas de Dinosaurio de Santisteban del Puerto transporta a quien lo visita a un pasado muy remoto, cuando el hombre aún no caminaba por la tierra, con una antigüedad superior a los 230 millones de años. Se encuentra a un kilómetro del núcleo urbano de Santisteban del Puerto y es uno de los dos yacimiento de icnitas localizados en Andalucía. En este yacimiento paleontológico se encuentran una serie de 24 huellas de hasta nueve centímetros de profundidad pertenecientes a dinosaurios bípedos del Triásico.
El Pinar de Cánava es un interesante ecosistema forestal que tiene al pino carrasco como protagonista que se encuentra en término municipal de Jimena. La singularidad de este pinar, de unos 120 ejemplares, se encuentra en su alto grado de naturalidad y, sobre todo, en su longevidad, con pinos de entre 100 y 250 años. Frente a las típicas formas de pinares jóvenes con troncos rectos y copas cónicas, contrastan los ejemplares retorcidos de este Monumento Natural.
El paraje situado en Torre del Campo en un antiguo jardín de unas dos hectáreas de extensión, hoy dominado por una rica masa forestal mediterránea en la que disfrutamos de ejemplares de gran antigüedad. Aquí podemos observar especies vegetales como el quejigo, coscoja, durillo, jazmín amarillo, clemátides, madreselva y así hasta completar una multitud árboles y arbustos entre los que destaca el Arrayán de La Bañizuela, un ejemplar catalogado como singular.
Situado en el municipio de Valdepeñas de Jaén, este ejemplar de Quercus faginea Lam., representativo de la vegetación autóctona mediterránea, está considerado como uno de los de mayores dimensiones del territorio andaluz. El quejigo es uno de los árboles más representativos de la vegetación mediterránea, sobre todo de aquellos territorios que presentan un clima subhúmedo.
Si ya conoces Covadonga y más adelante descubres este lugar, te sorprenderá el paralelismo estético, místico e histórico que existe entre ella y un lugar del Valle de Cangas, donde se dice que Don Pelayo inició la guerra contra los musulmanes. Hay quien considera este sobrecogedor espacio como la Covadonga andaluza y, según la tradición, aquí se apareció la Virgen de Tíscar, imagen exaltada tras la caída de la fortaleza árabe en el siglo XIV.
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