La provincia de Jaén está perdiendo gran parte de sus niños. Es una evidencia que la despoblación provoca un envejecimiento del censo jiennense pero hay algunos datos que son una ventana directa al problema. Es el caso del número de menores en edad de escolarizar (entre 0 y 4 años) que hay en los municipios de la provincia. Según las últimas cifras facilitadas por el Instituto Nacional de Estadística, en 2023 había en Jaén 22.912 menores con hasta cuatro años de edad mientras que en el año 2013 eran 31.796. Es decir, en los últimos diez años la provincia ha perdido 8.884 niños, un 27,94 por ciento de los que tenía.

Y eso que es raro ver en Jaén escenas de la España deshabitada, sin niños por las calles. El único municipio donde hay menos de cinco menores de cuatro años es Villarrodrigo, que ha pasado en la última década de tener 12 a los tres con los que cuenta actualmente. Le siguen en el ranking de pueblos con menos ‘peques’ Benatae, Génave e Hinojares, con 11 cada uno, aunque cabe destacar que en el caso de estas tres últimas poblaciones la situación es prácticamente la misma desde hace diez años.

Caso muy distinto es el del Larva que apenas tiene una tercera parte de los niños que había en 2013. Por entonces eran 31 los menores en edad de escolarizar que contaban en las calles de este municipio de Sierra Mágina mientras que ahora no superan los 13. Uno menos hay Santiago de Calatrava y en 15 se quedan tanto Aldeaquemada como Santa Elena. Es también especialmente sangrante este último caso pues este pueblo de Despeñaperros pues hace una década tenía 34 habitantes menores de cuatro años.

Pero si hay un sitio en el que se esté notando el descenso de la población de menor edad es en las grandes ciudades. La capital es una buena muestra de ello pues ha sufrido un descenso del 31,08 por ciento, llegando a perder 1.882 niños con respecto al año 2013 (en 2023 fueron 4.173). Caso similar se vive en Linares donde ya no llegan a 2.000 los pequeños en edad de escolarizar (1.948), mientras que hace una década esa cifra rebasaba el límite de los 3.000 (3.109). En Alcalá la Real se ha pasado de 1.021 niños a 818 y en Úbeda de 1.795 a 1.186. Andújar tampoco se escapa a la pérdida de nueva savia para la población pasando de los 1.974 niños menores de cuatro años que tenía en 2013 a los 1.355 que se pueden ver hoy en día por sus calles.