Vecinos y aldeas piden paralizar la planta de biometano de Alcalá la Real: "Hay viviendas muy cerca"

El proyecto para la instalación de una planta de biometano en Alcalá la Real ha abierto un nuevo intenso debate social y político en el municipio, que se suma a los del resto de poblaciones de la provincia donde se pretende instalar una planta de biogás o biometano. El Ayuntamiento ofreció el pasado 22 de octubre información detallada sobre la iniciativa, después de que el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) publicara el inicio del periodo de información pública para su autorización ambiental integrada.

El proyecto, promovido por la empresa Desarrollos Bioenergéticos de Andalucía S.L., se enmarca en la estrategia autonómica de impulso al biogás, anunciada por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, quien designó a Jaén como cabecera andaluza de las plantas de biometano. El alcalde de Alcalá la Real, Marino Aguilera, y la concejala de Urbanismo, Encarnación Pérez, comparecieron para explicar el procedimiento y garantizar “transparencia absoluta”. Aguilera aseguró que el objetivo municipal es “aclarar dudas y evitar informaciones erróneas que circulan en redes sociales”, subrayando que se trata de “una oportunidad y algo muy positivo para Alcalá la Real”.

La planta se ubicará en el paraje Casa de Toro, junto al Camino de la Aduana, en una superficie de 150.000 metros cuadrados. Estará a más de 6 kilómetros del casco urbano, 3 kilómetros de Mures y más de 2 de Ribera Baja, e incluirá una línea eléctrica aérea de 890 metros y un centro de seccionamiento para suministro energético. La planta de biometano procesará residuos vegetales del olivar, principalmente alperujo y restos de poda, sin incluir residuos animales ni purines. Estará dotada de tres balsas herméticas (dos para alperujo y una para digestato) diseñadas para evitar emisiones y olores.

La Plataforma Ciudadana Stop Biometano Alcalá la Real y Aldeas mantuvo recientemente una reunión con el alcalde, miembros del equipo de gobierno y técnicos municipales, para trasladar sus preocupaciones y objeciones vecinales sobre lo que consideran “carencias técnicas, legales y ambientales” del proyecto.

Su portavoz, Jesús Romero, explicó a Jaén Hoy que están en contra sobre todo por los "problemas de salud y medioambientales que se pueden generar, como ya se ha visto en otros municipios”. Romero recordó que hay casas unifamiliares muy próximas a la zona donde se pretende ubicar, como Casilla de Mures (a 1,2 km), Ermita Nueva (a 1,8 km), Ribera Baja (a 2,2 km) y Mures (a 3,1 km), además de cortijos y casas rurales más próximas. "Hay una casa habitada a 100 metros", apunta.

La plataforma afirma haber reunido más de 4.000 firmas en contra del proyecto y asegura que el Ayuntamiento dispone de instrumentos legales y competencias suficientes para paralizar o impedir la implantación de la planta.

Además, el colectivo ha solicitado formalmente al consistorio: La copia íntegra de los expedientes de compatibilidad urbanística otorgados a la empresa promotora; autorización para instalar mesas informativas en la vía pública y la convocatoria de una consulta popular y, si fuera necesario, una ampliación del plazo de alegaciones ante la Junta de Andalucía. “Sabemos que el Ayuntamiento tiene recursos y herramientas para que por lo menos no se ponga aquí”, insistió Romero.

El tema fue abordado también en el Consejo de Alcaldes Pedáneos, celebrado en el Edificio Joven, donde el equipo de gobierno, encabezado por Marino Aguilera, Mercedes Flores, Jesús Aguilar y Rocío Garrido, informó a los representantes de las aldeas y recogió sus impresiones. Un vecino de Mures, expresó su inquietud: “La gente está descontenta porque dicen que puede emitir olores. Yo me opondría en ese caso, porque me perjudicaría en mi negocio. Tendrán que estudiarlo bien.” Estas declaraciones reflejan un sentimiento extendido entre parte del vecindario, que pide mayor información técnica y garantías ambientales antes de que el proyecto avance.

Desde el ámbito académico, el catedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Jaén, Eulogio Castro, ofreció una visión técnica del proyecto, señalando que “la producción de biometano es positiva desde el punto de vista medioambiental, porque permite eliminar la carga orgánica de los residuos agrícolas, como el alperujo, y transformarla en energía renovable”. Castro añadió que Jaén tiene una enorme capacidad para generar biogás debido a su gran superficie de olivar, y que el proceso no debe suponer riesgos para la salud humana si se realiza en condiciones controladas. Sobre los olores, el experto indicó que como cualquier instalación industrial, "cuanto más alejada esté del núcleo urbano, mejor se reducen las molestias”.

En exposición pública hasta mediados de noviembre

El proyecto incluye una línea eléctrica aérea de 890 metros, un centro de seccionamiento y una inversión de 35 millones de euros, con la previsión de crear entre 8 y 12 empleos directos, además de la generación de actividad económica en el sector agrícola y de servicios. Se tramita como actuación extraordinaria en suelo rústico, conforme a la Instrucción 1/2025 de la Junta de Andalucía y la sentencia 25/2024 del Tribunal Constitucional, que definen el marco legal de las energías renovables.

El expediente se mantiene en exposición pública hasta mediados de noviembre, durante la cual los ciudadanos, entidades y administraciones pueden formular alegaciones. "La Plataforma valoró positivamente que el Ayuntamiento reconociera su capacidad legal para presentar alegaciones a la Autorización Ambiental Integrada (AAI), aunque señaló que hasta el momento no se había planteado ejercerla, especifica Stop Biometano Alcalá la Real y Aldeas.