No, San Lucas no es el patrón de Jaén: siete curiosidades de la feria que seguramente no conocías

¿Conoces estas siete anécdotas de la Feria de Jaén? Dónde comenzó, por qué se llama así, cuáles son los murales del concurso nacional de arte que decora sus paredes o en qué consisten Las Chilindrinas. Te lo contamos todo

Gastronomía de feria: comidas imprescindibles si vienes a San Lucas en Jaén

Las casetas de la Feria se llenan de comidas a mediodía.
Las casetas de la Feria se llenan de comidas a mediodía. / Esther Garrido

Cada 18 de octubre, Jaén respira tranquilidad y fiesta: tranquilidad, porque habitualmente es día festivo local, lo que da cierto margen de maniobra para desconectar del trabajo y la rutina diaria; de fiesta, porque se celebra el día que el santoral marca como el dedicado a San Lucas. Sin embargo, ni es el patrón de Jaén y ni siquiera Jaén tiene un patrón, sino dos patronas. Esta y otras muchas curiosidades de la Feria de San Lucas de Jaén te las contamos a continuación.

1. Es la última feria de Andalucía

Llega el otoño, y San Lucas

La Feria de San Lucas es la última gran feria de Andalucía del año. De hecho, como sucede con otras como la Feria de Málaga, originalmente solía celebrarse en torno a la Asunción de la Virgen María, que se celebra cada 15 de agosto. Sin embargo, tal y como cuenta Helena Arjona de Lagarto Tours, una epidemia de fiebre amarilla hizo que se trasladara su celebración al mes de octubre, coincidiendo con una antigua feria de ganado.

2. San Lucas, el “no” Patrón

Las dos patronas de Jaén

A diferencia de lo que mucha gente piensa (incluidos algunos jiennenses) aquí no tenemos un patrón, sino dos patronas. La primera de ellas es Santa Catalina de Alejandría, figura que da nombre al castillo y que fue clave para la toma de la ciudad por parte del Reino de Castilla.

La otra patrona de Jaén es la Virgen de la Capilla, cuya fe se profesa en la Basílica Menor de San Ildefonso, declarada como tal en 2010 por el papa Benedicto XVI. Allí mismo está ubicado el Santuario de la Virgen, a la que se puede ver a través de un cristal incluso desde el exterior.

Entonces, ¿por qué se llama Feria de San Lucas?

Hay quienes sostienen que la denominación de la Feria de Jaén provenía de celebrar la onomástica de uno de los personajes más célebres que pasaron por la ciudad: el Condestable Don Miguel Lucas de Iranzo. De hecho, ya se celebraban ferias de ganado en su honor en torno a las mismas fechas.

Antigua Feria de Ganado de Jaén en los años 40.
Antigua Feria de Ganado de Jaén en los años 40. / Jaén desde mi atalaya

3. ¿Dónde se celebra la Feria de Jaén?

Cambios de ubicación

Las ubicaciones de la Feria de San Lucas han ido cambiando a lo largo de las últimas décadas: con orígenes en la Plaza de Santa María, a los pies de la Catedral de Jaén, como feria del ganado, ha tenido emplazamientos tan recordados como el del Parque Felipe Arche, donde actualmente hay construidas unas instalaciones deportivas municipales.

De hecho, todavía es posible ver las antiguas columnas de acceso a lo que era el recinto ferial, más cerca todavía del casco urbano. No fue hasta los años 90 cuando se trasladó al actual recinto ferial.

4. Sin albero también hay feria

Lo mejor para evitar el barro

Es una de las penurias más habituales a la hora de vestirse para ir a la feria en el recinto oficial -ya sea de flamenca o de paisana- y tiene nombre propio: el albero. Esa arena fina con color de la arcilla es uno de los enemigos de cualquier look que se precie. Sin embargo, eso en Jaén no es problema, ya que la feria está adoquinada en su mayor parte, siendo de alquitrán el suelo de la zona de las casetas. Más cómodo, imposible.

El motivo no es, en absoluto, estético, sino práctico: raro es el año que no llueve en San Lucas, después de semanas e incluso meses secos en la ciudad. Sin embargo, como si de una plegaria al dios de la lluvia se tratase, lo habitual es que alguna que otra lluvia -e incluso tromba de agua- caiga durante los días de fiesta.

5. Las Chilindrinas por el Día de San Lucas

Humor con crítica social

El genio de Vica nos dejó un legado muy importante que preside cada día de San Lucas, es decir, cada 18 de octubre. Caiga en el día de la semana que caiga, es la fecha exacta en la que se expone lo que en la ciudad se conoce como ‘Las chilindrinas’: viñetas llenas de sátira que ponen a la actualidad política local, nacional e internacional en negro sobre el blanco lienzo a través de viñetas humorísticas.

Todo ello acompañado de mensajes escritos en rima que hacen el resto para que pases una feliz mañana paseando por la Lonja de la Diputación de Jaén, donde se suelen exponer, maravillándote de cómo va el mundo tras los ojos de quien dibuja.

El objetivo va un paso más allá de convertir arte en crítica social por un mundo mejor: incluso se destina uno de los murales para dejarlo en blanco y que sea el propio público, ciudadanos y visitantes, los que vuelquen en ese espacio sus deseos de cambio más recónditos a través de dibujos y frases.

6. Un recinto decorado con grafitis de toda España

Arte efímero en el ferial

El actual Recinto Ferial ‘Alfonso Sánchez Herrera’, junto a la Carretera de Granada, fue escenario de la celebración del festival CreAcción Urbana, organizado por el Patronato de Cultura, Turismo y Fiestas del Ayuntamiento de Jaén.

La convocatoria atrajo a una decena de artistas del grafiti y la pintura mural venidos desde varios puntos de España, siendo el combo formado por Miguel Ángel Belinchón ‘Belin’ y a Myrwan los ganadores del primer premio (se repartieron hasta cinco). Los verás a la entrada del recinto ferial desde la rotonda principal, justo donde se sitúa la zona de tiendas.

7. El vino que se bebe no es de Jaén

Chupito a chupito se hace la ruta del vino

Los chatos de vino de Cariñena son una estampa típica de la Feria de San Lucas.
Los chatos de vino de Cariñena son una estampa típica de la Feria de San Lucas. / archivo

Una cosa es irte de vinos por el centro de Jaén durante una comida de feria y otra muy diferente bajar al recinto ferial y no hacer la ruta de vinos dulces. En el primer caso, aún es posible degustar alguno de los deliciosos y mal llamados “caldos” de uva con raíces en las tierras de Jaén.

Sin embargo, una vez en el ferial, lo típico es hacer la ruta del vino, pidiendo de parada en parada tres rondas de vino dulce de Cariñena acompañados de barquillos de galleta para mojar. Y es que, habitualmente, tras las dos primeras rondas, te invitan a la tercera. Como la tapa, pero con vino, y al revés. “¡Salud, y feliz San Lucas!”.

stats