Los pedos de lobo: la sorprendente seta que puedes ver este otoño en las sierras de Jaén

El otoño es la época del año perfecta para hacer rutas micológicas que, si son guiadas, permiten descubrir y conocer variedades tan curiosas como las llamadas “pedos de lobo”.

Aunque poco tienen que ver con el canino al que hacen referencia, estas setas atraen la atención de todos por su forma cónica y a la vez flácida: basta con tocar levemente su parte más elevada para que expulse sus esporas en una pequeña nube de color verdoso, dándole sentido al gracioso nombre que tiene.

¿Son comestibles las setas pedos de lobo?

Habitualmente las distintas variedades de setas se dividen entre las comestibles y las no comestibles. No es así con los pedos de lobo. Curiosamente, este tipo de hongo solo es seguro para el consumo humano en sus géneros Lycoperdon y Calvatia, pero solo cuando son jóvenes, es decir, cuando el interior es completamente blanco y firme.

En estado más avanzado de edad, cuando el interior aparece oscuro, verdoso, marrón o polvoriento no son seguras para su ingesta. Es entonces cuando, a pesar de no poder comerse, sí podemos disfrutar del espectáculo que supone verlas lanzar al aire esa bruma verdosa tan característica.

Cómo distinguirla de otras setas

Uno de los problemas a la hora de buscar y recolectar estas setas pedos de lobo es que, en sus fases tempranas, algunas amanitas mortales –como por ejemplo la archiconocida Amanita phalloides– pueden confundirse con un pedo de lobo antes de abrir el sombrero. De ahí que siempre sea imprescindible hacer una identificación cien por cien segura antes de cogerla.

Los expertos dudan mucho de los contenidos de algunas aplicaciones para teléfonos móviles, ya que pueden fallar. Lo ideal es contar con un guía especializado que ayude a dar un juicio final. Tampoco es recomendable cogerla por gusto, ya que, además de hacer la colecta en cestas de mimbre, evitando bolsas, si las mezclas con otro tipo de setas este veneno se propagará por todos los ejemplares.

Dónde ver los pedos de lobo en Jaén

Las sierras de Jaén se llenan de setas y hongos por estas húmedas fechas, y seguramente haya pedos de lobo, así como otros llamativos tipos micológicos en cualquiera de las sierras jiennenses. Sin embargo, hay un lugar donde su hallazgo no da lugar a dudas: el Parque Natural de Despeñaperros.

La zona de La Aliseda es perfecta para descubrirlas, verlas e incluso tocarlas para disfrutar del curioso, aunque corto espectáculo que sus esporas ofrecen al ser diseminadas, dando lugar a nuevas setas que en la próxima temporada aparecerán por las zonas circundantes.

Justo al borde del parque se encuentra el Centro de Visitantes Llano de las Américas, a las afueras del municipio de Santa Elena. Es el principal punto de información para quienes visitan Despeñaperros, ya que en su oficina encontrarás información privilegiada sobre rutas senderistas, puntos de interés, flora, fauna y geología del parque.

Algunas de las actividades que organiza habitualmente son rutas de observación de lince ibérico y fauna, recorridos en 4x4 por áreas restringidas, rutas por el patrimonio histórico en Despeñaperros o la ruta del Camino Real-El Empedraíllo-Puerto del Rey.