En tránsito
Eduardo Jordá
¿Tú también, Bruto?
El apagón del lunes me recuerda una columna de Antonio Burgos. Cuando nombraron presidente de Sevillana de Electricidad a Jaime Ybarra Llosent a final de los 90, Antonio escribió una anécdota sublime. Mucha gente le llamó para felicitarle y pedirle un enchufe. Uno de sus interlocutores rizó el rizo en la recomendación: “Jaime, coloca a mi niño, que mi niño hace virguerías con la luz”. Estuve una vez en el búnker de Red Eléctrica en Madrid. Una instalación de máxima seguridad; en caso de emergencia existe una réplica exacta en lugar secreto para sustituir su función. Allí hacen malabares con la luz.
En el centro de control de Redeia, nombre comercial de REE, hay un peculiar mapa de España a pantalla gigante. Se señalan los miles de nudos en los que confluyen las autopistas por las que circula la electricidad que transporta en exclusiva, gestionando las 60.000 plantas generadoras de energía del país. Sus técnicos y sofisticados programas deben conseguir el prodigio de que en cada instante se produzca la misma electricidad que se consume. Eso es lo que se desestabilizó y produjo el apagón; no se sabe por qué.
Hay una peculiar definición de las energías renovables: desobedientes. No hace sol, viento o llueve a voluntad. Las energías limpias son caprichosas. Y no son almacenables, salvo la hidráulica. Así que hacen falta otras más constantes para asegurar el abastecimiento. Y Francia se resiste a una mayor conexión con el resto de Europa. Y ahí entramos en el capítulo goyesco español: el duelo a garrotazos. Todo el mundo ha encontrado un culpable, que no es él. La presidenta de Redeia, ex ministra de Zapatero, dice que en su casa lo han hecho bien. El presidente del Gobierno ha hecho de alcalde de Villar del Río: como “presidente vuestro que soy os debo una explicación y esa explicación que os debo os la voy a dar”. Ha hablado de fuerte oscilación en el sistema eléctrico europeo, de la OTAN, de la UE y del CNI. Y reclama explicaciones a las empresas privadas. El PP pide que se prolongue la vida de los siete reactores nucleares del país más allá de 2035 para apoyar el decreto antiaranceles. Los pronucleares apuntan al exceso de renovables sin afinar los sistemas.
No sabemos qué ha pasado, ni cómo se hace el mix energético o se forma el precio del pool, ni si nos conviene la tarifa libre o la regulada, ni entendemos el recibo. Pero hoy va a salir una encuesta del CIS sobre el apagón. Nadie hace virguerías con la luz, lo que se hacen son negocios propagandísticos, políticos, económicos, ideológicos o estratégicos.
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