El parqué
Continúan los máximos
This browser does not support the video element.
La demolición del Teatro Cervantes de Jaén (1972-1973) fue mucho más que el derribo de un edificio: fue el crimen perfecto contra la memoria colectiva. Un secuestro cultural perpetrado a plena luz del día, con la complicidad de las mismas instituciones llamadas a protegerlo. Aquel acto de pura especulación simboliza el punto de colisión entre dos Españas irreconciliables: la que atesoraba un legado cultural y sentimental, y la que, en nombre de un progreso ciego, sacrificaba su patrimonio histórico, impulsada por los intereses económicos del momento.
También te puede interesar
Lo último
Contenido patrocinado por Covap
Covap reduce más de un 18% la huella de carbono en cada litro de la leche de vaca que produceContenido patrocinado por Cibervoluntarios
YoConecto: una forma sencilla y gratuita de aprender y usar la tecnologíaEl parqué
Continúan los máximos
No hay comentarios