Fútbol

Gregorio Manzano: el entrenador jiennense de la gesta copera del RCD Mallorca en 2003

Gregorio Manzano, exultante, levanta el título copera en el césped del Martínez Valero.

Gregorio Manzano, exultante, levanta el título copera en el césped del Martínez Valero. / Cedida

El RCD Mallorca vivirá esta noche ante el Athletic Club su cuarta final de la Copa del Rey. La única vez que levantó el título copero, en 2003, su entrenador tenía sello jiennense: Gregorio Manzano (Bailén, 1956). En la previa de la final, Jaén Hoy recuerda junto al técnico jiennense aquella temporada inolvidable para el mallorquinismo. 

Gregorio Manzano nos recibe al teléfono tras una semana muy mediática, en la que ha concedido numerosas entrevistas en diferentes medios de comunicación para recordar aquella hazaña. "Es lo que toca, esta final tan bonita nos permite recordar aquella de 2003", nos comenta. 

Rebobinamos con él hacia la primera eliminatoria de aquella Copa del Rey de la temporada 2002-2003. Se vieron las caras con la UD Gramanet de Segunda B. "En aquella época se jugaba la eliminatoria a partido único en casa del equipo de inferior categoría. Aquel duelo tenía la dificultad añadida de que el césped era artificial. La Grama nos lo puso muy difícil y al final, en el minuto 89, vencimos con un gol de Álvaro Novo a la salida de un córner. Salvamos el primer escollo", señala Gregorio Manzano. 

La segunda ronda les cruzó con otro equipo histórico del fútbol español, en aquel entonces también en Segunda B: el Hércules. "Nos tocó visitar Alicante, en el Rico Pérez, en otro partido que fue muy complicado. Nos llevaron hasta la tanda de penaltis, pero Leo Franco paró un par de ellos y pasamos", indica. 

Ya en octavos de final, al RCD Mallorca le tocó verse las caras con el Real Valladolid, el equipo en el que Gregorio Manzano debutó en Primera División. Las eliminatorias a partir de entonces ya era a ida y vuelta. "En Palma, nos sacaron un empate (2-2). La eliminatoria estaba igualada y teníamos que visitar Zorrilla en pleno enero. Tuvieron que pinchar las porterías porque estaban heladas del frío. Aquel partido no pudo jugar Eto'o por sanción, pero salió Carlitos en punta y en media hora había hecho un hat-trick que nos puso el pase muy de cara. Acabamos ganando 1-4".

Doble goleada en Copa y en Liga al Real Madrid 'Galáctico'

En la siguiente ronda, el bombo le deparó al conjunto bermellón el Real Madrid. "En cuartos de final os llegó el 'miura', el 'gordo' de la lotería. Pensamos que hasta ahí habíamos cumplido porque venía el Real Madrid galáctico, que luego fue campeón de liga. En el partido de ida, que fue en el Bernabéu, la idea era no salir ya derrotados y dejar abierta la eliminatoria. Luchamos para conseguir un buen resultado y lo conseguimos. 1-1, tras un gol de Nadal en un saque de esquina", 

En la vuelta, el RCD Mallorca sacó a relucir su mejor versión y escribió con letras de oro una de sus grandes gestas. "Llegó todo un Real Madrid, con Zidane, Beckham, Raúl...con toda la artillería en el campo. Y resultó ser la noche de Copa del Rey más mágica que se ha vivido en la historia del Mallorca. Ese 4-0 lo dice todo, pero no ya en la rotundidad del marcador, sino en la belleza de los goles. Ya estábamos en semis". 

Esa plantilla de Gregorio Manzano le tomó la medida al Real Madrid. Poco después del 4-0, en liga y en el Santiago Bernabéu, los bermellones le endosaron un sonrojante 1-5. "Es otra noche que está en el recuerdo de la afición mallorquinista. Con la particularidad de que hicimos los cinco goles en la segunda parte, ya que al descanso nos fuimos perdiendo 1-0. Esa temporada, muy exitosa en todos los aspectos, ganamos en el Bernabéu, en el Camp Nou, en Mestalla, en San Mamés o en el Sánchez Pizjuán. Son palabras mayores", reconoce. 

Tras ese recital el RCD Mallorca alcanzó las semifinales y se cruzó con otro hueso duro de roer, el RC Deportivo de La Coruña. "Nos tocó el vigente campeón de la edición anterior, la del Centenariazo de 2002. Nuevamente llegamos a Riazor pensando en mantener las opciones para la vuelta. Y en el minuto 89, ganábamos 0 - 3. Pero en los tres o cuatro minutos de añadido, nos metieron dos goles y acabamos 2-3. En el partido de vuelta todo podía pasar. Sin embargo, nos hicimos fuertes. Llegamos a ir perdiendo con un gol de Fran, pero un tanto de Ibagaza en otro córner supuso ese empate y nos metió en la final".

La primera gran final de Samuel Eto'o y la gestión emocional de un suceso trágico

Gregorio Manzano recuerda la preparación mental que supuso aquel duelo, que a diferencia de la actualidad, se disputó un 28 de junio de 2003 en el estadio Martínez Valero de Elche, ya con la temporada liguera finalizada, como broche a la campaña. Enfrente, el Recreativo de Huelva, que acababa de descender a Segunda División. "Dentro de nuestro recorrido, teníamos la moral por las nubes. La final no se nos podía escapar. Tuve que rebajar la excitación, porque no habíamos sido capaces de ganarle al Recre en liga, ni en Huelva, ni en casa. Les hice ver a los jugadores que si no estábamos al cien por cien durante todo el partido, el Recre iba a vengar ese descenso levantando la Copa". 

La final estuvo marcada por la Copa Confederaciones, que disputaba la Camerún de Samuel Eto'o pocas fechas después, y por un suceso traumático, el fallecimiento en pleno partido preparatorio de Marc-Vivien Foé. El RCD Mallorca consiguió el permiso de la selección para que Eto'o se incorporase más tarde a la concentración. Sin embargo, en el entrenamiento previo a la final, saltó la noticia de la muerte de su compañero.

Gregorio Manzano conversa con Samuel Eto'o. Gregorio Manzano conversa con Samuel Eto'o.

Gregorio Manzano conversa con Samuel Eto'o. / Cedida

Gregorio Manzano fue esencial en la gestión de una situación tan complicada a nivel emocional. "Cuando te sacas el curso de entrenador, nadie te enseña a cómo reaccionar cuando antes de una final fallece en pleno partido un compañero de selección de la estrella de tu equipo. Fue algo anómalo y muy desgraciado. Estábamos entrenando antes del partido y empecé a ver mucho movimiento entre la prensa, una cierta inquietud. Me informó mi delegado de la noticia. No se sabía mucho más. Cuando terminó el entrenamiento se me ocurrió coger a Samuel y apartarlo del grupo porque todo el mundo lo estaba esperando a la salida para preguntarle. Le eché manos a los hombros y le dije que tenía que darle una triste noticia. Se quedó mirando al cielo, con la mirada pérdida. Sólo me preguntó por qué. Yo sólo le dije que quería que lo supiese antes que nadie y que era un acontecimiento muy triste", rememora Gregorio Manzano.

"Mi consejo es que te quedes y que ganemos la Copa para dedicársela a tu compañero. Lo que hagas, bien hecho está". Esas fueron mis palabras en caliente. Luego toda la plantilla y la afición le arropó y vivió esos momentos tristes con nosotros. Por lo demás, creo que Samuel tenía ganas de jugar esa final, fue su primera gran final en su dilatada trayectoria".

Samuel Eto'o decidió quedarse y fue el principal protagonista de la final. El camerunés provocó un penalti a los 20 minutos que Walter Pandiani se encargó de materializar. "Ese gol tranquilizó un poco los nervios, porque ya estábamos con el marcador a favor y sabíamos que el Recre buscaría el empate y dejaría espacios". Ya en la segunda parte, en el minuto 73 y 83, dos zarpazos al contragolpe del propio Eto'o, que firmó un doblete, sirvió el título en bandeja al plantel mallorquín. "Fueron dos goles maravillosos, pero no fue fácil, el Recre nos puso las cosas muy difíciles", asegura Gregorio Manzano.  Aquel equipo liderado por el técnico de Bailén hizo historia en el fútbol balear y ese título, todavía hoy, 21 años más tarde sigue generando una sonrisa imborrable a su protagonista. 

Gregorio Manzano: el entrenador de la gesta copera del RCD Mallorca en 2003 Gregorio Manzano: el entrenador de la gesta copera del RCD Mallorca en 2003

Gregorio Manzano: el entrenador de la gesta copera del RCD Mallorca en 2003 / Cedida

Una final entre dos equipos equilibrados, sin favorito claro

De cara a la final de esta noche, Gregorio Manzano no pone etiquetas de favorito. "Nosotros ya tuvimos esa vitola en su día y nos costó mucho. Ahora se le está otorgando al Athletic Club por su historial, por sus recientes cinco finales y por su actual clasificación liguera, pero yo veo dos equipos muy igualados, con distintos estilos de juego, físicamente muy fuertes y con buen juego de estrategia a nivel ofensivo y defensivo. El Athletic se caracteriza por la velocidad de sus hombres de ataque, mientras que el Mallorca por la contundencia de sus defensores. Todo puede ocurrir".

No quiere darle ningún consejo a Javier Aguirre, porque cree que "es un hombre preparado para llevar al equipo a dónde lo ha llevado, de la manera tan eficiente que lo ha hecho. Sabe las armas del Athletic, lo habrá estudiado a la perfección. Solamente desearle suerte porque en el mejor de los casos la suerte espero y deseo que caiga del Mallorca por todo lo vivido allí. 

Nos despedimos de Gregorio Manzano mientras se prepara para vivir la final en La Cartuja, como comentarista junto a su capitán en 2003, Miguel Ángel Nadal, para la retransmisión que hará el canal balear IB3 del partido. "Me lo pidieron y allí estaré. Lo viviré con la pasión de los colores, que son bermellones, y con la prudencia, porque somos profesionales y hay que comentar con rigor. Pero si gana el Mallorca, habrá que celebrarlo". 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios