Vía Augusta
Alberto Grimaldi
Anatomía de un bostezo
Muay Thai
Marisa Delgado puso fin a su participación en el Mundial de Muay Thai que se celebra en Turquía con un balance positivo tras ser la octava del mundo. En su experiencia mundialista, la jiennense derrotó en su primer combate a la actual campeona de Asia, la filipina Floryvic Montero, y cayó derrotada en su segundo combate frente a la gran favorita, la local Fatma Ceken.
Con algo menos de dos años en el Muay Thai de élite, Marisa Delgado se sitúa entre las ocho mejores del mundo en su categoría de 51 kilos, algo impensable hace unos meses. En dos combates marcados por la intensidad y la dureza, la jiennense peleó con coraje, técnica y corazón hasta el final, y confirmó tanto su alto nivel internacional como su hambre de victorias.
La jiennense demostró su espíritu de luchadora, más vivo que nunca en el Mundial IFMA, así como su enorme inteligencia y capacidad de aprendizaje en una disciplina tan exigente que requiere grandes dosis de esfuerzo, sacrificio y dedicación, valores que Marisa Delgado representa perfectamente.
La cita mundialista ha supuesto para la deportista de Jaén una aventura única. Con muy pocos medios, ha realizado esta importante proeza abriendo el camino del Muay Thai en Andalucía y Jaén. “Ha sido una experiencia increíble, de la que saco muchas conclusiones, para el futuro de cara a volver el Mundial en las mejores condiciones y luchar de nuevo por obtener un importante resultado. Gracias a todas las personas que me ayudan y el apoyo de tanta gente”, expresó Marisa Delgado en un comunicado.
A su regreso de territorio turco, Marisa Delgado descansará unos días y comenzará con su equipo a planificar su futuro en la élite de esta disciplina para buscar los recursos necesarios para desarrollar su deporte en las mejores condiciones que garanticen el éxito en su carrera deportiva de alto nivel.
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