Las claves del plan territorial de Andalucía para la provincia hasta 2050: "El agua será el principal desafío de Jaén"

La diversificación del olivar y las energías renovables, claves del futuro modelo territorial para la Jaén de 2050 según el Plan de Ordenación del Territorio de Andalucía (POTA). Según se expuso este miércoles en el salón de actos del Museo Íbero, la versión preliminar del documento incorpora medidas para reforzar la economía provincial, mejorar las infraestructuras y garantizar la sostenibilidad del agua y del paisaje rural.

La redacción del documento está a cargo de Manuel González Fustegueras, un reputado urbanista jerezano que expuso en Jaén las claves de su último trabajo. Según expuso en el Museo Íbero, desde su posición estratégica en el noreste de Andalucía, Jaén se perfila como una provincia esencial en el nuevo modelo territorial diseñado por la Junta para el horizonte de 2050. La revisión del POTA sitúa a Jaén como un espacio prioritario para impulsar la transición energética, la modernización del campo y la revitalización industrial, con el objetivo de lograr un desarrollo equilibrado que combine sostenibilidad, empleo y cohesión territorial.

El documento, actualmente en información pública (puede consultarse desde la web de la Consejería de Ordenación del Territorio), identifica los principales retos de la provincia: la dependencia del olivar, la escasa diversificación económica, el déficit de infraestructuras de transporte y el riesgo de despoblación rural. Frente a ello, plantea un conjunto de estrategias que combinan gestión eficiente de los recursos, impulso empresarial y ordenación ambiental del territorio.

El POTA reconoce que el agua será el principal desafío de Jaén en las próximas décadas. El plan propone la modernización de los sistemas de riego, la optimización del uso hídrico y la recuperación de acuíferos y cauces fluviales, especialmente en la cuenca del Guadalquivir.

También se promueve una agricultura más sostenible y diversificada, que reduzca la dependencia del monocultivo del olivar mediante la introducción de nuevos cultivos de rentabilidad media y menor consumo de agua. Estas medidas buscan asegurar la resiliencia del sector agrario ante el cambio climático y la competencia internacional, al tiempo que se protege el suelo fértil y el paisaje agrícola tradicional.

La provincia se perfila como una de las más aptas para la implantación de energías limpias en Andalucía. El documento contempla la zonificación de proyectos de energía solar y de biomasa del olivar, con el fin de impulsar la autosuficiencia energética y generar empleo en zonas rurales.

En paralelo, se apuesta por la reactivación del eje industrial y logístico Linares–Andújar–Bailén, recuperando su papel como corredor económico del Alto Guadalquivir. El plan sugiere potenciar estos polos con nuevas actividades vinculadas a la tecnología, la transformación agroalimentaria y la logística sostenible. Infraestructuras y movilidad sostenible

Mejores conexiones ferroviarias

Uno de los puntos más críticos del diagnóstico provincial es el aislamiento en las comunicaciones. El POTA plantea mejorar la conexión ferroviaria con Córdoba y Granada, impulsar un sistema de transporte público interurbano eficiente y reforzar las carreteras secundarias que vertebran las comarcas rurales.

Asimismo, el plan prevé la creación de una Red de Espacios Públicos de Interés Supralocal, que integre los corredores verdes y mejore la movilidad ciclista y peatonal entre municipios. El objetivo es acercar servicios, equilibrar el desarrollo y garantizar una movilidad sostenible en toda la provincia.

La revisión del POTA reconoce el potencial turístico y ambiental de Jaén como motor económico complementario. Los parques naturales de Cazorla, Segura y Las Villas, Sierra de Andújar, Despeñaperros y Sierra Mágina se incorporan a la Infraestructura Verde de Andalucía, reforzando su protección y conectividad ecológica.

Además, el documento impulsa un modelo de turismo cultural y de naturaleza centrado en Úbeda, Baeza y Jaén capital, con actuaciones de recuperación patrimonial y promoción del ecoturismo de interior. Estas medidas buscan diversificar la economía local y poner en valor los recursos naturales y culturales de la provincia como elementos de identidad territorial.

Reto demográfico

La lucha contra la despoblación rural es una de las líneas transversales del nuevo modelo territorial. El POTA prevé mejorar la conectividad digital, garantizar servicios públicos básicos y fomentar proyectos de emprendimiento local ligados al medio ambiente, la economía circular y el turismo. La idea es reforzar la cohesión social y económica de los pequeños municipios y equilibrar la relación entre las áreas urbanas y rurales.

El horizonte que plantea la Junta de Andalucía es el de una Jaén más competitiva, innovadora y sostenible, que mantenga su liderazgo en el olivar pero que amplíe su base económica con energías limpias, turismo y tecnología.

El POTA define así un modelo en el que la provincia se consolida como nodo verde del sur peninsular, capaz de combinar su patrimonio natural y cultural con una economía moderna y baja en emisiones.