Proyecto para resucitar el culto a la Virgen del Tránsito en San Juan

Erguida, se diría que de una forma casi hierática, y con las manos en actitud de oración. La Virgen yacente que recibe a los fieles en la iglesia de San Juan, encajada en un sencillo sepulcro, es una devoción que permanece aún como enuncia su propia advocación: en tránsito. Muchos la desconocen actualmente y cuando la admiran por primera vez sopesan su iconografía suspendida entre la muerte y la gloria, pero lo cierto es que ni lo uno ni lo otro. Responde a una representación más dogmática dentro de la Iglesia Católica: "La Madre de Dios, terminado el curso de su vida terrena, fue llevada en cuerpo y alma a la gloria celestial", proclamó el propio Papa Pío XII en 1950.

La imagen jiennense, de autor anónimo, vino a suplir una anterior talla destruida durante la Guerra Civil y que llegó a procesionar por las calles de esta antigua collación. Después de varias décadas con un nutrido grupo de mujeres encargadas de dar culto a esta imagen, fue con tan solo trece años cuando le encomendaron a Miguel Ángel Martos la tarea de vestirla. Así fue como nació en su interior el interés por potenciar su devoción y recuperarla junto a una comisión de fieles del barrio. "Desde el año 2017 tomamos las riendas y empezamos a atraer a gente joven", comenta Miguel, hoy como responsable principal.

El desconocimiento generalizado sobre el origen de esta talla ha propiciado más de una leyenda entre los bancos de San Juan: "Se dice que estaba emparedada en una casa del barrio, la llamada Casa de la Virgen, y que la regaló una familia a la parroquia". Cierto o no, es de reseñar la existencia de alguna fotografía en blanco y negro de una anterior Virgen del Tránsito procesionando por el barrio. "Buscamos que vuelva a salir, ya que la gente mayor recuerda todavía esa estampa", señala.

Antes de cumplir con ese anhelado sueño, será el propio Obispado quien deposite primeramente su confianza en este proyecto si todo marcha según lo previsto. "De momento ya contamos con alrededor de 72 fieles, y este año hemos iniciado el proceso para constituirnos como grupo parroquial", anuncia Martos. Entre las actividades litúrgicas programadas con motivo de su festividad, a través de las redes sociales convocan a los cofrades a participar en el solemne triduo glorioso presidido por el sacerdote Antonio Javier Cañada, que tendrá lugar en los días previos, así como el besapié a la imagen en la víspera del 15 de agosto.

El intenso trabajo de estos jóvenes cobra aún mayor relevancia cada año con el altar efímero levantado en el interior del templo, donde exponen el recoleto patrimonio de esta particular iconografía mariana. "Durante los días de triduo presentaremos la medalla oficial del grupo y el banderín que nos representa", añade. En medio de esta labor callada, la Virgen del Tránsito casi parece sonreír en su dormición un nuevo agosto, a la espera de ascender pronto al cielo del Santo Reino. Por lo pronto, Miguel Ángel lo tiene bastante claro: "Es una devoción antigua que no podemos olvidar".