La Guardia Civil, concretamente el Servicio de Protección de la Naturaleza, en el desarrollo del programa PACIAP, realizó operaciones de control en el polígono industrial denominado “Guadiel” término municipal de Guarromán, en compañía de Inspectores Veterinarios de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía. Los equipos procedieron a inspeccionar el interior de las instalaciones de una distribuidora de pescado, ubicada en el referido polígono industrial. En la inspección, se procedió por parte de los Agentes del Seprona e Inspectores de Pesca, a inspeccionar varias partidas de pescado, localizando 52,880 kilogramos de chirla y 288,420 de almeja japonesa con una talla inferior a la reglamentaria. Por los motivos expuestos, se procedió a la inmovilización de todo el producto, el cual una vez analizado por los Inspectores de Pesca de la Delegación de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía, certificando dicho producto apto para el consumo, siendo entregado en comedores sociales de la provincia.

Misión del Seprona

La misión del SEPRONA es velar por el cumplimiento de las disposiciones que tiendan a la conservación de la naturaleza y del medio ambiente, de los espacios protegidos, de los recursos hídricos, así como de la riqueza cinegética, piscícola, forestal y cualquier otra relacionada con la naturaleza, según recoge la propia declaración de intenciones del Cuerpo en la web de la Guardia Civil.

De este modo se encarga de la protección de suelo, agua y atmósfera, de la sanidad animal y de la conservación de especies de flora y fauna. El Servicio lucha además contra vertidos y contaminación del medio ambiente, el comercio ilegal de especies protegidas, actividades cinegéticas y de pesca irregulares, el maltrato animal, la defensa de los espacios naturales, la prevención, investigación y extinción de incendios, los yacimientos arqueológicos y paleontológicos y la ordenación del territorio.

El Seprona es una unidad con una estrategia global de protección del medio ambiente, llevando a cabo labores de concienciación, prevención, vigilancia administrativa y, algo que es fundamental, es por ley la policía judicial específica en materia medioambiental, encargándose de la investigación de los ilícitos penales sobre la protección de la naturaleza y el medioambiente.