Sentir Baeza 2025 en imágenes: música, patrimonio y AOVE en una edición inolvidable
Lo mejor del indie nacional se citó en la Ciudad Patrimonio de la Humanidad durante dos intensas jornadas con un escenario gratuito en el casco histórico y dos más en el Recinto Ferial
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Bajo el cielo estrellado de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad, el Festival Sentir Baeza celebró los días 27 y 28 de junio su tercera edición, consolidándose como uno de los encuentros imprescindibles del verano indie nacional. Con un equilibrio perfecto entre música, cultura y gastronomía, el evento volvió a demostrar que su fórmula —un cartel de altura, un entorno monumental y el sabor del mejor AOVE— no solo funciona, sino que emociona.
La cita arrancó el viernes en el Recinto Ferial, donde Maren abrió el escenario ‘IGP Aceite de Jaén’ con una actuación luminosa y cargada de sensibilidad. Su voz fresca y su presencia cercana fueron el preludio ideal para uno de los platos fuertes del festival: Sidonie, que desató el júbilo del público con su potente y colorido universo indie-psicodélico. El grupo barcelonés fue recibido con entusiasmo por un público que, ya desde el inicio, sabía que estaba viviendo una noche mágica.
El relevo lo tomó Querido, proyecto liderado por el hijo de Iván Ferreiro, que ofreció una propuesta íntima, melódica y llena de matices. A continuación, Veintiuno revolucionó el ambiente a base de pop y ritmos electrónicos que no dejaron a nadie quieto. Le siguió Karavana, que confirmó por qué se ha convertido en una de las bandas jóvenes más prometedoras del panorama nacional. La jornada concluyó con un estallido de baile y luces de la mano de Elyella, que convirtieron el recinto en una auténtica pista de baile con euforia colectiva incluida hasta bien pasada la medianoche.
El sábado arrancó con una apuesta diferente pero igual de especial. La Plaza de la Barbacana, uno de los rincones más bellos de Baeza, acogió el escenario ‘Gusto del Sur’, donde la música se mezcló con el aroma del aceite de oliva virgen extra. Entre degustaciones, charlas y un ambiente relajado, los conciertos gratuitos de Vuelo Fidji, Sarria, Venturi y Bea Miau ofrecieron una experiencia que conectó patrimonio, sabores y sonidos suaves, demostrando que Sentir Baeza también brilla con la luz del día.
La noche del sábado volvió a traer al Recinto Ferial la fuerza del directo. Blam de Lam dio el pistoletazo de salida con una propuesta sonora innovadora y valiente, seguido por las energéticas actuaciones de Alcalá Norte y Hey Kid, que mantuvieron el listón bien alto. Cuando Zahara apareció en escena, el público se rindió: su voz, su magnetismo y su capacidad de emocionar hicieron mella en cada rincón del recinto. El viaje continuó con Malmö 040, que aportaron una personalísima mezcla entre lo urbano y lo electrónico.
El clímax llegó con Dorian, cuyo directo épico estuvo lleno de nostalgia, potencia y carisma a raudales. Su repertorio, plagado de himnos generacionales, hizo corear a un público entregado de principio a fin. Como colofón perfecto, Besmaya y la esperada sesión de We Are Not DJ’s mantuvieron la energía alta hasta las 5 de la madrugada, cerrando el festival por todo lo alto.
Con un aforo de 5.000 personas por día para garantizar la comodidad, dos escenarios nocturnos de gran formato y una programación que apostó tanto por artistas consagrados como por nuevas voces, Sentir Baeza 2025 ofreció, además de música en directo, una experiencia original que se nutrió de gastronomía y aceite de oliva virgen extra para que el público se fuera a casa con el mejor sabor de boca.