El pueblo jiennense que tienes que visitar al menos una vez en la vida: se le conoce como “La Puerta de Andalucía”

Todo el que alguna vez ha cruzado de Andalucía hacia la meseta ibérica por carretera ha pasado por allí. Sin embargo, no todos lo conocen. En el límite entre Andalucía y Castilla-La Mancha, rodeada de montañas y atravesada por la autovía A-4, se encuentra Santa Elena, un pequeño municipio jiennense que se ha ganado el título de “Puerta de Andalucía”. Enclavada en el extremo norte de la comarca de Sierra Morena, la localidad ofrece más que una parada en el camino con vistas a sus montañas y arboleda.

Cómo llegar a Santa Elena

El acceso es sencillo. La localidad se encuentra a solo 78 kilómetros de Jaén capital y a escasos 5 kilómetros del Parque Natural de Despeñaperros. Para llegar en coche basta con tomar la autovía A-4 y salir por los desvíos 258 o 266. También se puede llegar por la carretera comarcal JA-7100, que conecta directamente con el área recreativa de La Aliseda, uno de los espacios más visitados.

Naturaleza que enamora a primera vista

El Parque Natural de Despeñaperros

Uno de los mayores atractivos turísticos de Santa Elena es su ubicación junto al Parque Natural de Despeñaperros, un espacio protegido que cuenta con espectaculares formaciones geológicas, abundante fauna y una vegetación característica del bosque mediterráneo. El desfiladero de Despeñaperros, con sus 4 kilómetros de longitud, es una imponente garganta esculpida por el arroyo homónimo sobre una falla del macizo ibérico. Sus paredes de roca son casa para rapaces como el águila real o el azor, además de especies emblemáticas como el lince ibérico o la nutria.

Parajes de Santa Elena que merecen una visita

Dentro del parque se encuentran parajes tan icónicos y recomendados para visitar como:

• Los Órganos: monumento natural formado por columnas de roca que asemejan los tubos de un órgano catedralicio.
• El Empedraillo: un tramo de la calzada romana que unía Cástulo con Toledo.
• El Quejigal del Collado de los Jardines: un espacio rico en biodiversidad vegetal y animal.

Área Recreativa de La Aliseda

A apenas cinco kilómetros del núcleo urbano, La Aliseda es un rincón ideal para pasar un día de campo y hacer rutas senderistas de varios niveles, la mayoría de ellas aptas para cualquier persona. Este valle está poblado de alisos, encinas, alcornoques, castaños y sauces, atravesados por el río La Campana, de aguas cristalinas.

Patrimonio histórico y cultural

Iglesia Parroquial de Santa Elena

Construida en 1793 sobre una antigua ermita medieval, la Iglesia Parroquial es uno de los símbolos del pueblo. Fue levantada para conmemorar la victoria cristiana en la Batalla de las Navas de Tolosa (1212). La preside la imagen de la patrona del municipio, que no podía ser otra que la propia Santa Elena.

Santuario Ibérico del Collado de los Jardines

Considerado uno de los tres grandes santuarios ibéricos de la península, se ubica en plena Sierra Morena Oriental. Allí se han hallado centenares de exvotos de bronce representando oferentes, sacerdotes y guerreros. El conjunto incluye restos de un poblado con murallas y fundición de metales.

Casco urbano colonizador

Fundado en 1767 por Carlos III dentro del proyecto de Nuevas Poblaciones de Sierra Morena, el casco urbano de Santa Elena, declarado Bien de Interés Cultural, responde a un diseño neoclásico con calles en retícula y una gran plaza rectangular. En torno a ella se ubican los principales edificios: la iglesia, el Ayuntamiento y el pósito de Diezmos y Labradores.

Pinturas rupestres

Santa Elena conserva valiosas pinturas rupestres declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1998, dentro del Arco Mediterráneo. Destacan las cuevas de las Vacas del Retamoso, del Santo y de los Escolares. Las primeras son especialmente conocidas, por desgracia, por la vandalización a la que fueron sometidas en diciembre de 2021.

Museo de la Batalla de las Navas de Tolosa

Este museo conmemora la célebre batalla en la que las tropas cristianas derrotaron a los almohades. Forma parte de la Ruta de los Castillos y las Batallas, perfilándose como una visita imprescindible para entender la importancia de Santa Elena en la historia medieval de España.

Gastronomía típica de Santa Elena

Ya te decidas por hacer alguna ruta senderista o conocer el pasado histórico de Santa Elena, siempre es importante saber dónde ir a comer los platos más tradicionales. Y es que la cocina de Santa Elena es todo un homenaje a la tradición serrana, donde los productos de monte cobran protagonismo. Entre otros, algunos platos destacados son:

• Andrajos: una masa de harina cocida en caldo de liebre.
• Ciervo en salsa con almendras, romero y tomillo.
• Níscalos al ajillo salteados con jamón y vino blanco.
• Tortilla Alfonso XIII: una curiosa creación con riñones de cordero y champiñones.

En repostería sobresalen las gachas dulces, los pestiños, la flor de lis y la bebida típica Risol, elaborada con anís, café y mejorana. Todo un chute de energía para celebrar la sobremesa con buen sabor de boca. Si no sabes dónde parar o hacer tu reserva, aquí tienes un listado con los mejores restaurantes para comer en Santa Elena.

Con poco más de mil habitantes, Santa Elena sorprende al viajero por su patrimonio histórico de primer nivel, parajes naturales singulares y una deliciosa gastronomía que todavía conserva tradiciones ancestrales. Prepárate para un viaje emocionante donde la naturaleza y la calidad de vida propia de los pequeños pueblos andaluces cobran su máximo sentido.