Agricultores y ganaderos se movilizan en Bruselas contra una reforma de la PAC que pone en riesgo al sector: "Estamos en serio peligro"

Miles de agricultores y ganaderos de toda Europa se han concentrado este jueves en Bruselas en una manifestación de carácter histórico para mostrar su rechazo a la propuesta de reforma de la Política Agraria Común planteada por la Comisión Europea. La protesta, que coincide con la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, ha reunido a representantes del sector primario de prácticamente todos los países miembros.

Desde la capital comunitaria, el secretario general de UPA Andalucía, Jesús Cózar, advirtió de que el planteamiento actual de la PAC “no gusta al sector” y reclamó que se dé un giro a una propuesta que, a su juicio, pone en riesgo la viabilidad de las explotaciones agrarias. Cózar abogó por una PAC “justa, con precios dignos y presupuestos suficientes” que permita a agricultores y ganaderos seguir viviendo de su trabajo y garantice el futuro del sector primario europeo.

En la misma línea se pronunció el secretario general de COAG Jaén y responsable de Olivar de COAG Andalucía, Francisco Elvira, quien alertó de las consecuencias que tendría la desaparición del modelo actual de política agraria común. “Estamos aquí en Bruselas para manifestarnos contra la nueva reforma de la PAC. Los agricultores, junto a los consumidores europeos, están en serio riesgo. La única política agraria común que nos unía en la Unión Europea está a punto de desaparecer”, señaló.

A estas críticas se ha sumado el gerente y portavoz de Asaja Jaén, Luis Carlos Valero, quien denunció que el borrador aprobado por la Comisión y el Parlamento Europeo contempla una reducción de más del 20% del presupuesto agrario. Valero alertó de que esta propuesta supone una renacionalización de las ayudas y subrayó que no solo es negativa por el recorte económico, sino porque “se carga la única política común que existía en la Unión Europea, que es la agraria”. En su opinión, de salir adelante en estos términos, la reforma supondría “enterrar definitivamente” la Política Agraria Común tal y como se conoce hasta ahora.

Además, Elvira advirtió de que una reforma en estos términos supondría “perder la soberanía alimentaria de los ciudadanos europeos”, con un impacto directo tanto en el campo como en la sociedad. Según detalló, esta situación se traduciría en un aumento de los costes de producción para los agricultores y, de manera inmediata, en una subida de la cesta de la compra. “Los ciudadanos europeos corren el riesgo de no poder tener alimentos baratos y de calidad en los supermercados”, incidió.

Durante la movilización, las organizaciones agrarias también han reclamado que el sector primario no sea utilizado como moneda de cambio en los acuerdos comerciales con terceros países y han pedido una simplificación de la burocracia y mayor seguridad jurídica. “Esto no solo afecta a los agricultores y ganaderos, afecta a toda la sociedad”, enfatizó Cózar, que confía en que los gobiernos europeos escuchen las reivindicaciones del sector y apuesten por una PAC que garantice el abastecimiento alimentario y la sostenibilidad del medio rural.