Sala de espera
Jesús Vicioso
El día en el que no compré nada
Tribunales
La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Úbeda ha citado a declarar como investigados a los dos policías locales que, la madrugada del 29 al 30 de octubre de 2020, detuvieron por desórdenes públicos a Cristóbal Montávez, el vecino de Jódar que, según la versión oficial, se suicidó esa noche ahorcándose con el cordón del pantalón de su chándal en el calabozo de la Policía Local galduriense, dentro del Ayuntamiento, mientras los agentes lo custodiaban.
Es una de las medidas ordenadas por la jueza instructora después de que el Tribunal Constitucional le obligara recientemente a reabrir el caso, derivado de la denuncia de la familia del fallecido contra los dos agentes de Policía Local por delitos de homicidio, detención ilegal, destrucción de pruebas, lesiones y abuso de autoridad. El Juzgado ubetense mandó dar carpetazo a la investigación en febrero de 2021, una decisión ratificada por la Audiencia Provincial de Jaén meses después, en junio.
Tres años más tarde, el pasado 2 de diciembre, el tribunal de garantías estimó el recurso de amparo de los familiares de Cristóbal para que se reanudara el caso. En su sentencia, lamentaba “la insuficiente actividad probatoria desplegada por el órgano instructor”, que, además de denegar que se practicaran diversas pruebas solicitadas por los denunciantes, ordenó archivar la investigación a pesar de que aún no se contaba con informes relevantes como el definitivo de autopsia -en el preliminar se hablaba de etiología de la muerte posiblemente suicida por “ahorcadura incompleta”-.
Según el Constitucional, habían quedado sin respuesta “aspectos elementales y decisivos de la instrucción como las propias circunstancias en que se produjo la muerte, el origen del cordón con el que se produjo el ahorcamiento, el concreto recorrido y las condiciones en que se produjo la detención y en particular, las razones por las que se localizaron restos de sangre del fallecido en lugar distinto al del arresto o la corrección en las labores de atención o vigilancia del detenido atendido su estado”.
La instrucción se reanudará a finales del próximo enero con las declaraciones del padre del fallecido, en calidad de denunciante, y de un testigo: el médico del centro de salud de Jódar que atendió la noche de los hechos tanto a Cristóbal como a los dos policías que lo detuvieron. Al margen de los testimonios, la jueza ha solicitado a la Fiscalía que indique si acepta o se opone a que se lleve a cabo la triangulación de las llamadas efectuadas desde los teléfonos de los policías, otra de las peticiones de la familia Montávez que la propia magistrada denegó en su momento. Aunque los agentes aseguraron que arrestaron a Cristóbal en la calle Granada, en la calle Domingo Arroquia se encontraron unas muestras de sangre cuyo perfil genético coincide con el del fallecido. Así quedó acreditado en un informe del servicio de biología del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses del 18 de octubre de 2021, cerca de cuatro meses después de que la Audiencia de Jaén ratificara el archivo del caso. Las declaraciones judiciales de los policías como investigados están fijadas para febrero.
Los denunciantes siguen reclamando que se revisen los ordenadores de la Policía Local para saber a qué hora tuvo lugar la lectura de derechos a Cristóbal, el traspaso de diligencias a la Guardia Civil y la solicitud al Colegio de Abogados de Jaén para designar un abogado de oficio para el detenido. También solicitan la revisión de las cámaras del centro de salud galduriense y la identificación del personal sanitario que administró a Cristóbal varios medicamentos la madrugada del 30 de octubre de 2020.
Temas relacionados
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios