La Santa Cena vuelve a cobijarse en San Félix de manera extraordinaria

Los vecinos del Gran Eje vivirán en la jornada de este sábado lo más parecido a un 'déjà vu'. A primera hora de la mañana podrán volver a ver salir el misterio de la Santa Cena desde la parroquia de San Félix de Valois, ubicada en plena avenida de Andalucía. Eso sí, no será el paso que los jiennenses recuerdan haber visto tiempo atrás cada Domingo de Ramos. En este caso, el pasaje evangélico en cuestión lo representa la hermandad homónima de Linares con motivo de la Magna.

La acogida de esta corporación en dicho templo fue algo que pilló de sorpresa a muchos cofrades, ya que no se volvía a ver una salida procesional del mismo desde el traslado definitivo de la Santa Cena jiennense al barrio del Bulevar. Su cambio de sede a la moderna parroquia de San Juan Pablo II dejaba huérfana de cofradías a esta concurrida calle del nuevo Jaén. Sin embargo, este vacío vuelve a llenarse con uno de los pasos más singulares del Rosario Magno Diocesano.

Un misterio colosal

Es conocido como 'el Tanque' por sus dimensiones y peso, pues el conjunto escultórico que tallase Víctor de los Ríos procesiona sobre el chasis de un antiguo armón de la II Guerra Mundial. Sus cerca de 6.000 kilos y seis metros de largo provocan que tenga que ser controlado por un total de 18 personas, motivo que ha dificultado aún más su traslado desde la ciudad minera a la capital.

Esta estructura, por si fuera poco, le permite girar sobre sí misma hasta 180 grados debido a que el misterio procesiona en disposición horizontal. Con estas maniobras a la entrada y salida del templo, la Santa Cena puede contemplarse en todo su esplendor en las calles más anchas, algo que seguramente podamos apreciar nada más efectuar su salida a las amplias avenidas de esta zona de Jaén.

Dos patronas señeras

Además, esta hermandad pasionista no será la única en partir desde San Félix. También lo harán junto a ella dos conocidas patronas de la diócesis jiennense: la Virgen de Tíscar, de Quesada, y la Virgen del Collado, de Santisteban del Puerto. Estas dos devociones, aunque puedan parecer algo pequeñas frente al 'Tanque' linarense pueden presumir de ostentar el mayor rango en una talla mariana, ya que ambas fueron coronadas canónicamente en sus respectivos municipios.

De esta manera, quienes añoran aquellos Domingos de Ramos de trasiego en el Gran Eje podrán vivir algo similar al amparo de este acontecimiento histórico. Y quién sabe si esta suma de circunstancias planten una nueva semilla cofradiera en este templo que se quedó sin nazarenos hace ahora ocho años.