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Alberto Grimaldi
La conversión de Pedro
Si preguntáramos a los más golosos del lugar, seguramente nos dirían que entre sus dulces favoritos estará alguno con mucho chocolate o nata, ya fuera en el relleno o en la cobertura. Sin embargo, existe un dulce típico de Linares que, aunque gana cada día más adeptos, no necesita ninguno de estos ingredientes para tener un sabor realmente dulce. Tanto, que para los menos acostumbrados a este sabor seguramente resulte algo empalagoso. Hablamos del chachepó, una creación linarense de curioso nombre que se va haciendo hueco en el catálogo de golosinas hechas en la provincia de Jaén.
El chachepó es un bizcocho esponjoso y jugoso con un toque de licor, normalmente ron o aguardiente, que lo hace especialmente aromático. Su característica forma cilíndrica se obtiene al hornearse en moldes que le dan esa forma, y se empapa en un almíbar que lo hace aún más sabroso. Aunque su receta original no incluía chocolate ni nata, su sabor dulce y su textura esponjosa lo han convertido en un favorito entre quienes buscan un postre distinto, con un sabor auténtico y lleno de historia.
El nombre chachepó proviene del francés cache-pot, que significa "macetero" o "tiesto". En este caso, se refiere al molde cilíndrico en el que se hornea el chachepó, dándole su singular forma que sobresale del recipiente, recordando el crecimiento de una planta en una maceta.
La historia del chachepó se remonta al siglo XIX, cuando diversas empresas europeas (francesas, inglesas, y holandesas) llegaron a Linares atraídas por sus ricos yacimientos de plomo. En esta época, los trabajadores extranjeros trajeron con ellos algunas de sus costumbres, incluyendo sus tradiciones culinarias. Entre ellas, los franceses introdujeron el Baba au rhum, un bizcocho empapado en licor que se horneaba en un recipiente conocido en Francia como cache-pot. Con el tiempo, este dulce se adaptó a los gustos locales y terminó tomando el nombre chachepó, una derivación de cache-pot.
Este bizcocho fue popularizado por la familia Vallcanera, quienes tenían una panadería en Linares y que, con el tiempo, pasaron la receta y el conocimiento de su elaboración a la famosa Confitería Félix de Amo, un establecimiento muy valorado en la ciudad. Aunque Félix de Amo cerró hace algunos años, la receta del chachepó sigue viva en Linares, y hoy en día hay pastelerías que continúan con esta tradición, elaborando el chachepó según la receta original.
El chachepó tiene un antecesor con una interesante historia: el Baba au rhum. Este bizcocho fue inventado en el siglo XVIII por el rey Estanislao de Polonia, quien al encontrar seco su bizcocho babka, pidió a su pastelero que lo mejorara. Para complacerlo, el pastelero decidió remojar el bizcocho en vino dulce de Málaga, encantando al monarca.
Años después, cuando la receta llegó a Francia, el vino fue reemplazado por ron, dando origen al clásico Baba au rhum. Con su migración hacia Linares, el Baba au rhum se transformó en el chachepó, un dulce que refleja tanto la historia de la ciudad como la influencia de culturas extranjeras.
Si quieres preparar el auténtico chachepó, aquí tienes los ingredientes y pasos básicos para elaborarlo. La clave de este postre radica en conseguir un bizcocho esponjoso y ligero, que se embeba de un almíbar aromatizado con licor.
Ingredientes para el bizcocho:
Este postre, sencillo pero delicioso, es perfecto para disfrutar en ocasiones especiales o como un capricho dulce para los días más festivos. ¿A qué esperas para probar el dulce más famoso deLinares?
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