Real Jaén: Equilibrio en las victorias… y también en las derrotas

Hace mes y medio, cuando el Real Jaén encadenaba su tercera victoria consecutiva, pedía calma. Todo estaba saliendo de cara, pero sabía que antes o después llegarían momentos menos amables. En este deporte, las rachas cambian sin avisar, y ahí es donde toca mantener la cabeza fría, tanto cuando se gana como cuando se pierde.

El equipo había logrado ilusionar a toda la ciudad hasta el punto de meter a más de 11.000 almas a La Victoria ante el eterno rival, un ambiente que devolvía recuerdos de épocas mayores. Fue un partido que no mereció acabar en derrota, pero que rompió una dinámica fantástica: siete encuentros sin caer y 15 puntos de 21, que habían colocado al Real Jaén entre los candidatos a todo.

Aunque las sensaciones eran magníficas, el fútbol siempre te recuerda dónde estás. Dos tropiezos seguidos nos han devuelto a la crudeza de una categoría durísima, donde un par de resultados te disparan hacia arriba o te dejan mirando hacia abajo. Esta misma temporada hemos visto cambios bruscos por todas partes: del propio Real Jaén, que pasó del descenso al play off, al Linares Deportivo, que vivió el camino inverso, o al Lorca Deportiva, que tras seis jornadas sin ganar ha encadenado cinco triunfos seguidos para meterse arriba.

Todo esto muestra que, este año, más que nunca, toca ser equilibrados. No hay que sacar pecho cuando se gana, ni dramatizar cuando se pierde. Todos los equipos pasarán por momentos malos, y la diferencia estará en quienes sepan gestionarlos mejor. Por eso es tan importante cortar cuanto antes esta mini racha negativa y enganchar otra buena. Y sinceramente, no imagino mejor ocasión que el domingo ante el Recreativo de Huelva.

El Recre, un equipo con historia

Un rival que nos trae a la memoria tiempos en los que el Real Jaén era un fijo en la parte alta de Segunda B. Un equipo con historia, presionado por su reciente descenso y obligado a pelear por volver cuanto antes. Fuera de casa es peligrosísimo: tres victorias en cinco salidas y solo una derrota en su visita a Yecla. No necesita presentación y volverá a hacer que La Victoria tenga ambiente de categoría superior.

Es precisamente en estos momentos difíciles cuando debe aparecer la mejor versión del Real Jaén: la unión del vestuario y el respaldo de una afición que ha demostrado que sabe empujar cuando toca hacerlo. Con lo igualado que está el campeonato, un triunfo te devuelve la ilusión en un suspiro, como le ha ocurrido esta última semana a nuestro último rival, La Unión Atlético, pasando de mitad de la tabla al tercer puesto. Así será toda la temporada: rachas, curvas y cambios constantes.

El objetivo es claro: romper las malas dinámicas y estirar las buenas. Para lograrlo, el equilibrio de todos —jugadores, cuerpo técnico y afición— es fundamental. Ni ganando seremos los mejores ni perdiendo los peores. Y cuando más apoyo necesita este equipo es precisamente ahora. Todos juntos, y a por la siguiente batalla en La Victoria.